Beneficios de comer ecológico

Cada vez hay más tiendas de consumo responsable y alimentación ecológica y es más fácil ver también este tipo de productos en los supermercados. Pero, ¿sabemos de verdad qué beneficios nos aporta este tipo de alimentación? 

En theCosmethics trabajamos con la mejor cosmética natural y ecológica  porque queremos ofreceros lo mejor para vuestra piel. Pero el cuidado de nuestra piel y de nuestro cuerpo debe ser tanto por fuera como por dentro y por eso queremos hablaros de los beneficios de una dieta a base de alimentos naturales, sin químicos ni otros componentes que contaminen nuestro interior.

Beneficios de comer ecológico

Los alimentos ecológicos son todos aquellos que se producen de forma natural, sin tratamientos ni aditivos químicos. Esto, además de todas las ventajas medioambientales y socio-económicas que conlleva, implica un producto final sano. Aunque durante siglos hemos consumido este tipo de productos, el auge de la industria alimentaria hizo que en muy pocos años fuera casi imposible adquirir un producto en el mercado que fuera totalmente natural y sin añadidos.

Hoy en día la producción y venta de alimentos BIO y ecológicos va en aumento, fruto de una mayor conciencia social sobre los riesgos de ciertos productos en la cadena alimentaria.

Si queremos cuidarnos y cuidar nuestra piel, tenemos que llevar el estandarte de una vida sana en todos los ámbitos de la vida. De nada sirve aplicarnos la mejor cosmética natural y ecológica si nuestra dieta está plagada de conservantes, colorantes, bactericidas y otros químicos que dañan nuestro cuerpo desde dentro.
Cuando hacemos la compra, muchas veces pasa por nuestras manos algún alimento con la etiqueta “BIO” o “Ecológico”, sin que lo tengamos en cuenta o sepamos cual es la verdadera diferencia entre consumir este o su homólogo convencional.

Ventajas de consumir alimentos BIO, sobre todo para nuestra salud y la de nuestra piel:

• Más sabor: Los alimentos ecológicos se producen de forma natural, respetando sus ritmos de crecimiento y sin aditivos que alteren su sabor ni textura. Por eso, la comida ecológica es mucho más sabrosa. Si has probado alguna fruta o verdura ecológica sabrás de lo que hablamos y seguramente ya no querrás otra cosa en tu mesa.

• Más sanos: Se calcula que cada uno de nosotros consume una media de 2kg de aditivos al año, presentes en los alimentos que compramos. Estos pueden ser los causantes de problemas como migrañas, osteoporosis o hiperactividad. También están libres de pesticidas, relacionados con patologías como las alergias o el asma por ejemplo. Los alimentos BIO, además de no contener estas sustancias, tienen niveles más altos de vitaminas y minerales, por lo que resultan más favorables nutricionalmente.

• Sin OGM: En la agricultura ecológica no se autoriza el uso de organismos genéticamente modificados o transgénicos. Su empleo supone un problema para la biodiversidad y pueden entrañar también riesgos para nuestra salud. Los alimentos BIO tienen la seguridad de que no son transgénicos, cosa que muchos productos del mercado no pueden garantizar.

• Mejoran tu dieta: Cambiar nuestros hábitos a la hora de elaborar la cesta de la compra, va a suponer también un cambio en nuestro modo de alimentarnos. Los alimentos ecológicos no suelen sufrir procesados complejos, refinados ni otros tratamientos, por lo que supondrá alimentarnos más a base de materias primas de calidad. Además eliminarás de la dieta la comida basura y con ello el exceso de azúcares simples, aditivos o grasas trans que la componen. Eso sí, tocará ponerse a cocinar!

• Máxima calidad: Los procesos de cultivo, elaboración y venta en la producción ecológica están estrechamente vigilados y deben cumplir unas exigentes normas de trazabilidad. Esto garantiza un producto final de calidad y una gran transparencia para el consumidor.

• Libres de medicamentos: Muchos alimentos de origen animal están contaminados por los medicamentos que recibieron en vida. La presencia sobre todo de antibióticos en carnes y lácteos es un hecho que preocupa cada vez más, por ser un problema de salud pública importante y, además, un factor que el consumidor no puede controlar, ya que desconoce totalmente si los animales recibieron algún tipo de tratamiento. En la agricultura ecológica está prohibido el uso de antibióticos y, excepto en casos muy concretos, los tratamientos veterinarios son naturales y/o homeopáticos.

• Frescos y de temporada: Los productos BIO emplean solamente métodos de conserva natural y las frutas y verduras no pueden ser tratadas de forma externa para prolongar su conservación. Esto hace que los productos que consumamos sean más frescos y, en este último caso, siempre de temporada. Por eso también son mas ricos y saludables.

• Solidarios con el medioambiente y la economía local: La producción ecológica funciona fuera de las normas de comercio convencionales y, por lo tanto, supone toda una revolución social y medioambiental. Los métodos de producción son respetuosos con el medioambiente, ya que no son contaminantes y favorecen el mantenimiento de la biodiversidad. Además, cuando compras ecológico estás beneficiando a pequeños productores, muchas veces locales y evitando el gasto innecesario del transporte de grandes cantidades de mercancías. Aunque no lo parezca, este es un punto que también beneficia a nuestra salud, ya que un entorno sano favorece también un cuerpo y una mente sanos.